Cuando tras un gran traumatismo (accidente de tráfico, caída desde altura, etc.) la persona afectada parece estar grave o pierde el conocimiento, NO MOVEREMOS NUNCA AL HERIDO, pues podríamos causarle graves daños (rotura de cuello, etc.) En este caso, avisaremos de forma inmediata a los servicios de urgencia para que le asistan. 

En caso de fractura, suele aparecer inflamación, dolor intenso que impide al lesionado mover la zona afectada, incluso deformación, hematoma, etc. En estas situaciones nos limitaremos a inmovilizar la zona tal y como la tenga colocada el herido (entablillado), si nos es posible, y trasladar al lesionado a un centro médico o avisar a una ambulancia según requieran las circunstancias. 

En caso de traumatismos más leves, es adecuado mantener en reposo y en alto la zona afectada, aplicando frío local (por ejemplo hielo metido en una bolsa y recubierto por un pañuelo) durante 30 - 60 minutos inicialmente y luego 15 minutos cada 3 horas. Con ello, intentamos reducir en lo posible la inflamación. Si las molestias se mantienen o van en aumento, consultaremos con el médico