Diferencia entre suero fisiológico y lágrima artificial. 

Pese a que ambos sean de uso ocular, las lágrimas artificiales y el suero fisiológico son productos completamente diferentes. Sigue leyendo, ya que un mal uso puede agravar el problema ocular.

El suero fisiológico se utiliza para limpiar. Es un producto inocuo que no irrita ni daña los ojos, pero en caso de sufrir ojo seco, si sustituimos las lágrimas artificiales por suero, favoreceremos una mayor sequedad del ojo intensificando las molestias.

La lágrima artificial es un sustituto de la lágrima natural cuando esta no es de calidad o se produce de manera insuficiente. En muchas ocasiones existen molestias en los ojos y hay una continua secreción de lágrima natural. En este caso también es necesario el uso de lágrima artificial ya que, al llorar, la lágrima no permanece en el ojo y éste no tendrá la lubricación que necesita.

¿En qué casos uso estos productos?

  • Lágrima artificial: Tratamiento del ojo seco, en climas muy fríos o secos, cuando el aire acondicionado dañe nuestros ojos, en temporada de calefacción, cuando pasamos muchas horas delante del ordenador, tras una cirugía refractiva o cataratas, etc.
  • Suero fisiológico: Para limpiar o lavar los ojos en caso de conjuntivitis o alergias, o previo a la aplicación de cualquier tratamiento ocular con el objetivo de que el ojo esté limpio.
  • Recomendación: No las uses de manera indiscriminada ni sin consultar con un profesional sanitario.

Ojo seco e Hidratación ocular

El ojo seco es una enfermedad multifactorial de la lágrima y la superficie ocular que se manifiesta con molestias, alteraciones de la visión e inestabilidad de la película lagrimal que puede provocar daño en la superficie ocular. Normalmente suele ser bilateral y crónica. Al desestabilizarse la película lagrimal se produce una desecación del epitelio corneal y el componente mucoso de la lágrima no se fija bien, por tanto, el agua es repelida por la superficie corneal afectada, aumentando la evaporación de la lágrima y produciendo mayor exposición directa de la superficie ocular del aire. 

Entre las causas que lo producen son:

• Cambios hormonales. Afecta en mayor % a mujeres.

• Desequilibrio en alguno de los componentes oculares (lipídico, mucoso, acuoso).

• Alteraciones en la piel.

• Adicción al tabaco.

• Trastornos alérgicos.

• Enfermedades autoinmunes.

• Fármacos: antihistamínicos, diuréticos, betabloqueantes…

• Exceso de polución.

• Personas que han sido intervenidas de alguna cirugía refractiva o cataratas.

Síntomas:

• Enrojecimiento.

• Sensación de cuerpo extraño.

• Picor.

• Inflamación.

• Visión borrosa.

• Ojo rojo.

• Fatiga visual.

• Sequedad.

Consejo:

1. Realiza una correcta higiene de los párpados y pestañas.

2. Hidratación. Aplica lágrima artificial durante el día y pomadas oftálmicas lubricantes durante la noche si la sequedad es intensa.

3. Evita el uso de lentes de contacto.

4. Minimiza el uso de dispositivos electrónicos.

Recomendación: Usa la lágrima artificial Hylo gel, con alta concentración en ácido hialurónico y libre de conservantes, para recuperar el confort en tus ojos.

Si tienes esta u otra patología, consulta con un especialista sanitario.

Salud ocular en la pandemia.

¿Teletrabajas? Este post es para ti.

Los meses de pandemia están pasando factura a nuestra salud ocular. El principal problema es el abuso de dispositivos electrónicos. Para evitar los problemas visuales, recomendamos:

• Tener una postura adecuada.

• Cuidar la iluminación del espacio de trabajo.

• Haz descansos cada 20-30 minutos para cerrar los ojos.

¿Qué daños provocan en nuestros ojos la luz azul de los dispositivos electrónicos y la radiación ultravioleta?

Cuando atraviesan la córnea y el cristalino, llegan a la retina afectando a los fotorreceptores de la mácula que son los responsables de la visión.

Esto puede conducir a pérdidas de visión o dar lugar al desarrollo de patologías como cataratas, degeneración macular asociada a la edad, miopía, etc.

Si te es imposible usar con menos frecuencia los dispositivos electrónicos, te recomendamos aplicar el colirio MIREN para bloquear la luz azul que incide sobre nuestros ojos procedente de las pantallas. Por el contrario, si pasas mucho tiempo en el exterior o al volante, también protege contra la radiación ultravioleta.