La candidiasis es la segunda infección más frecuente de la mujer en la edad fértil.

El agente causal es una levadura llamada Cándida Albicans. Esta forma parte de manera natural en nuestra flora de la piel e intestino, pero que puede migrar a la vagina cuando se produce una alteración en la flora vaginal.

Las causas más frecuentes de esta infección son:

• Toma de antibióticos.

• Sistema inmune debilitado.

• Relaciones sexuales sin protección y esporádicas con varios individuos.

• Hay una elevada presencia de determinadas hormonas en periodos como el embarazo, durante la toma de anticonceptivos, etc.

• En pacientes diabéticos mal controlados.

• Uso de geles no aptos para la zona íntima.

• Ambiente cálido y húmedo.

¿Cuáles son sus síntomas? Pueden ser desde casi inexistentes hasta importantes.

• Picor e irritación de vagina y vulva

• Sensación de ardor o quemazón al orinar y durante las relaciones sexuales

• Secreción vaginal espesa, blanca y sin olor

• Dolores y molestias vaginales

• Inflamación y tumefacción de la vulva

Errores frecuentes:

• Pensar que la candida puede tratarse con antibióticos. De ahí la importancia de NO AUTOMEDICARSE.

• Confundir una infección bacteriana con una candidiasis.

Consulta con tu médico o farmacéutico ante cualquier sintomatología. Nosotros te ayudaremos.

¿Cómo prevenir la candidiasis vaginal?

La candidiasis es una infección íntima muy común y muy molesta. Sin embargo, puede prevenirse con probióticos vaginales cuando sean necesarios, mediante pequeños cambios en nuestros hábitos y con la ayuda de productos de higiene específicos de la zona íntima.

• Mantén una higiene íntima adecuada evitando el uso de jabones irritantes, desodorantes y perfumes inadecuados para la zona íntima.

• Utiliza productos específicos para la zona íntima y con acción reparadora.

• Limpia la zona íntima siempre de delante hacia atrás.

• Utiliza ropa interior de tejidos transpirables.

• Cambia tu bikini por uno seco después de cada baño y de hacer ejercicio. Evita las prendas húmedas.

• Evita la ropa interior ajustada.

• Cambia los tampones y compresas con frecuencia.

• Usa preservativo.

• Es importante tener la flora vaginal sana. Esto se consigue gracias a la ayuda de los probióticos con cepas de Lactobacillus. Consúltanos.

• Evita alimentos con mucho azúcar.

• Evita el estrés y lleva un estilo de vida saludable.